miércoles, 14 de octubre de 2009
jueves, 1 de octubre de 2009
domingo, 27 de septiembre de 2009
viernes, 25 de septiembre de 2009
25 de septiembre ♥
Todo gracias a una sola persona, que hoy me dijo la frase más linda que escuché en mucho tiempo ♥
jueves, 24 de septiembre de 2009
miércoles, 23 de septiembre de 2009
martes, 22 de septiembre de 2009
Estoy muy cansado, así que me limitaré a compartir con ustedes el fragmento de un artículo escrito por Sergio Sinay, que habla sobre el amor. Coincido totalmente con lo que dice este texto. Siempre pensé de ese modo, nada más que nunca pude expresar bien mi opinión sobre este tema: el amor.
¿Qué es el amor? La pregunta puede disparar tantas respuestas como personas a quienes les sea formulada. Se ha escrito y se ha dicho mucho sobre él, y se seguirá haciéndolo. Se lo bendice desde la felicidad, se lo maldice desde la frustración y el desencanto. Se afirma que es imposible vivir sin él y hay quienes sostienen que han aprendido a hacerlo.
El amor nace con quienes se aman, es una construcción de los amantes, que no es, en fin, un acto mágico. La creencia en la magia del amor ha dejado un tendal de víctimas emocionales. El amor es la encarnación de una poderosa energía que transforma, fecunda y sana. Pero sus raíces necesitan arraigar en seres y situaciones concretas y reales. Más allá de declaraciones y palabras, de juramentos y ensoñaciones, el amor se plasma de verdad cuando deviene en verbo, cuando se transforma en acciones. ¿Qué tipo de acciones? Son amorosos aquellos actos en los cuales la energía y la intención afectiva de una persona llegan a otra a través de gestos, actitudes, hechos y palabras que le permiten a ésta recibir el amor tal como lo necesita. Y para saber cómo es esa necesidad, quien ama debe prestar atención a la persona amada: mirarla, escucharla, sentirla y presentirla; debe registrarla como el ser único que ella es, y en ese proceso verla como alguien en continua transformación. No se ama en abstracto: se ama a alguien. Y no se ama instantáneamente. Inmediato es el enamoramiento. Nos enamoramos de alguien que nos atrae por motivos puntuales, pero imaginamos de ese ser más de lo que sabemos. El enamoramiento es entusiasmo, deseo, ilusión y desconocimiento. Es un punto de partida. El punto de llegada (cuando se llega) es el amor. Arribamos a él por el camino del conocimiento. Vamos conociendo a la persona de quien nos enamoramos, y en ese proceso aprendemos sobre nuestras similitudes y diferencias. En la medida en que éstas sean complementarias (las de valores, por ejemplo, no lo son) y aprendamos a integrarlas, construiremos amor. El camino que va del desconocimiento del enamoramiento al conocimiento del amor no es mágico. Requiere presencia, compromiso, buena fe, trabajo; y es un camino de transformación, aprendizaje y revelación a veces arduo. Ni la pasión ni el enamoramiento del inicio desaparecen cuando todo aquello se cumple, sino que hay una evolución, una maravillosa alquimia que los transmuta. Lo que no existe es el amor fantasioso de los cuentos de hadas, de las telenovelas, de ciertas películas y novelas oportunistas. Su búsqueda conduce a una ilusión fugaz y a un dolor lacerante. El amor no es dolor: no lastima, cura. En este aspecto, sufrir mucho no es amar mucho
domingo, 20 de septiembre de 2009
Muerte Parcial
Entré en las puertas del pasado
Me atendió un ángel caído
Pregunté sobre mi futuro indescifrable
Y me dijo que…
No cierre los ojos en el agua turbia
Que no juegue con demonios que se disfrazan de santos
Y que no confíe en los buenos presagios
En el lugar donde las personas morían antes de nacer
Y que el sueño de las flores era crecer
Estaba mi ángel
Curando mi angustia y aumentando mi poder
Aquel paraíso donde los sueños eran realidad y no viceversa
Brillante cielo color cereza
Allí donde las incertidumbres se hacían certezas
Caminaba yo a la desolación
Estaba perdido
Sumido en el infierno por no poder verte
Tenía miedo de perderte
Y morir sin amarte
Mi ángel vino, trató de rescatarme
Pero de los lazos del infierno no podía desatarme
En sus alas me gustaría aferrarme
Y a salvo con ella sentirme
Aquel paraíso donde los sueños no eran realidad, pero sí viceversa
Opaco infierno color cereza
Allí donde las incertidumbres se volvían certezas
Caminaba yo rumbo a la salvación
Alan Azcona
Sí, este tipo de pelotudeces escribo yo. El año pasado ganó una 2da mención en el certamen literario organizado por el diario Mi Ciudad, de Florencio Varela.
sábado, 19 de septiembre de 2009
Hola, don Pepito
Bueno señoras y señores, visitantes de este espacio. Les doy la bienvenida a lo que será mi blog, en donde hablaré de temas variados.
Tal vez cuente lo que me pasó en el día. Tal vez opine sobre temas que nos afectan en la actualidad. O tal vez ponga acá poemas y/o cuentos de mi autoría. También puedo compartir con ustedes artículos, frases, fragmentos, lo que sea, de lo que haya leído en algún diario, revista y/o libro.
Paso a contarles sobre mí: me llamo Alan, tengo 17 años, vivo en Florencio Varela, ubicado en la zona sur del Gran Bs. As. Este año no estoy yendo a la escuela (debido a inconvenientes que en un futuro no muy lejano contaré). Toco la batería en una banda de Deathcore, llamada All Our Hope Vanishes (antes nos llamábamos Before I Die, pero eso es otro tema que les contaré otro día), trabajo cada tanto en una empresa de sonido y luces para eventos (recitales, más que nada), y bueno, eso. En los siguientes posts seguiré hablando de mis cosas, ahora es momento de despedirse.
Hasta la próxima!